SOBRE LA PLAZA DE ESPAÑA
Junto a mi querida "Nonagenial" |
Nuevamente, Maribel Martínez Cemillán, se asoma a mi Blog para dejarnos un interesante relato sobre uno de los lugares más visitados de Madrid
LA PLAZA DE ESPAÑA.
La plaza de España, antiguo Prado de Leganitos, fue junto al
Paseo del Prado, desde Cibeles a la Puerta de Atocha, uno de los lugares de
paseo favoritos de los madrileños en aquellos lejanos tiempos en que Madrid era
una Villa regada por abundantes riachuelos, frondosa, repleta de árboles y
vegetación.
Desde entonces ha sufrido varias remodelaciones hasta su
actual aspecto, destacando en el centro el alto y armonioso monumento levantado
en honor de nuestro universal escritor, Miguel de Cervantes.
MONUMENTO A CERVANTES
Obra del
arquitecto Pedro Muguruza y ornamentado con una serie de escultura realizadas
por el escultor Coullot Valera referentes a sus inmortales personajes Don
Quijote y Sancho Panza
y algún otro de sus preciosas Novelas Ejemplares, como
La Gitanilla, La ilustre fregona, etc.
LOS JARDINES DE SABATINI
En la parte izquierda, los llamados “Jardines de Sabatini”,
que no creó Sabatini, en realidad fueron las cocheras de Palacio, enormes
barracones donde se guardaban las distintas carrozas, según su uso, protocolo,
lujo, paseo o viajes, después derribadas a partir de 1931 y decidiendo crear
una serie de jardines a imagen y semejanza de los ordenados por Felipe II en el
llamado Campo del Moro formando una preciosa perspectiva con la fachada
posterior de Palacio cómodamente contemplada sentados en los amplios bancos de
piedra.
PARROQUIA DE SANTA TERESA
Y, en la derecha, arrancando casi en la Cuesta de San
Vicente, un poco conocido convento de Padres Carmelitas Descalzos, hoy
parroquia de Santa Teresa, erigido en 1916 por suscripción popular encabezada
por los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia con 250 pesetas , inaugurado en
1928 al coincidir con el aniversario del nacimiento de Santa Teresa.
Un edificio un poco raro con el eclecticismo del siglo XIX,
elementos medievales, góticos y renacentistas, simulando una gran fortaleza
medieval, con sillares que recordara el libro “Las Moradas”, de la Santa,
rematada con airosa cúpula de azulejos policromados, ciertamente luminosa
cuando el sol la envuelve.
EDIFICIO ESPAÑA
En lo más alto, final de la Gran Vía, principio de la calle Princesa, el edificio España, edificado 1948-53, 26 plantas, 117 metros de altura, auténtico hito de orgullo español, durante siete años el primer “rascacielos” europeo, emblemático, diciendo a los demás países. “A pesar de que nos habéis dejado solos y aislados, poco después de una trágica Guerra Civil, seguimos haciendo todo con nuestros propios medios y siendo los mejores”
TORRE DE MADRID
Proyecto y dirección de los arquitectos Otamendi. El éxito
fue tan fabuloso que de nuevo los hermanos Otamendi en los años 1954-60,
levantan La Torre de Madrid, el edificio de hormigón más alto del mundo durante
28 años, dedicado a variados usos, oficinas, domicilios particulares, tiendas,
¡hasta un cine!, desde el último piso se divisa una maravillosa vista de todo
Madrid y la Sierra del Guadarrama.
PERMITIDME UN INCISO
Me viene a la memoria el estribillo de un chótis de mi padre Enrique Ramírez de Gamboa El Cipri titulado "Torres de Madrid".
Torres de Madrid
Torres de Madrid
que ocultan lo castizo
con su estilo Neoyorquín
¡Ay, Puerta del Sol!
¡Ay Puerta del Sol!
Prefiero tus tejados
con sus gatos de Charol
LA LEYENDA QUE NO FALTE
Y como en nuestra ciudad, calles y plazas, casi todas tienen
legendarias historias, finalizamos con una dedicada a San Francisco:
San Francisco en éxtasis bellísima pintura de Francisco de Zurbarán |
Andaba el Santo por el barrio de Leganitos, cuando aparece
corriendo un jovenzuelo que le pide ayuda, le persiguen los alguaciles por algo
que no ha hecho, el Santo le dice que siga corriendo y escape. Casi al momento
llegan los sudorosos guardias y le preguntan si ha pasado un chico corriendo,
San Francisco, mirando sus manos que introduce en las amplias mangas del
hábito, contesta "por aquí no ha pasado”, piadoso pretexto que salva a un
inocente.
Maribel Martínez Cemillán
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