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sábado, 9 de noviembre de 2013

Amparo Rivelles en México por Lourdes Franco Bagnouls

Con motivo del fallecimiento de la actriz, nuestra colaboradora Lourdes Franco nos envía este recuerdo a la Amparo Rivelles más mexicana. Esperamos que os guste.

Amparo Rivelles

El mundo de habla hispana ha sufrido una gran pérdida.
Ha remontado el vuelo una personalidad de la actuación, la señora Amparo Rivelles.
Para México, 1957 fue un año en el que el arte escénico se vistió de gala: la extraordinaria actriz, precedida de una carrera plena de triunfos y reconocimiento llegaba al país para permanecer aquí por cinco lustros.
El teatro, el cine y la televisión mexicanos tuvieron la fortuna de contar con la participación de Amparo Rivelles en sus elencos.
Apenas dos años después de su llegada a México, la Rivelles protagonizaría la película que, según la crítica, ocupa el lugar número seis entre los cien mejores ejemplos de cine mexicano: El esqueleto de la señora Morales, comedia de humor negro escrita por Luis Alcoriza.

Cartel de la pelicula

Aquí podemos ver el trailer de la pelicula:

       

La soberbia actuación de Amparo corre parejas con la de su compañero en el film, Arturo de Córdoba. Gloria, el personaje encarnado por la actriz desaparecida, está casada con un taxidermista.
Fotograma de la película
Ella tiene un defecto físico: una deformación en una rodilla que la hace cojear ostensiblemente.
A pesar de que su marido está locamente enamorado de ella, esta lo rechaza porque siente asco de su profesión.
Él, harto de la situación, decide matarla, pero urde un plan para salir exonerado del crimen: exhibe en el aparador de su taller un esqueleto de mujer con una malformación en la rodilla; y tanto las amigas de su esposa, como su padre confesor, escandalizados, lo denuncian, pues les parece obvio que tras la desaparición de Gloria y la exhibición del esqueleto, el crimen está más que probado.
Sin embargo, exámenes periciales demuestran que ese esqueleto no es el de la señora Morales, por lo que el taxidermista es puesto en libertad.
Seguro de que la justicia no podrá juzgarlo dos veces por el mismo crimen cuenta al sacerdote, en secreto de confesión, que en efecto, él se deshizo de su mujer.
La justicia divina se impone finalmente cuando, por equivocación, Pedro, el taxidermista, brinda con las amigas de su esposa con el vino preparado para su cónyuge y todos mueren.
Amparo Rivelles se especializó en protagonizar en el cine mexicano papeles de madre ejemplar. Entre las varias películas de este tipo se cuentan

Los novios de mis hijas (1964);

Que aquí os dejamos completita, ¿verdad que es un regalazo?

                          

El día de las madres (1968);
El día de las madres. Fotonovela sobre el
tema de la película homónima
Cuando los hijos se van (1969);

                              
Cartel de exhibición de la película

 La viuda blanca (1970)
Cartel de exhibición de La viuda blanca
 y El juicio de los hijos (1973).

El juicio de los hijos. Cartel de la película

Guillermo Murray
Fernando Soler
Enrique Rambal.
A pesar de que se la encasilló en este tipo de papeles, la calidad actoral de Amparo Rivelles se impuso siempre, de tal manera que cada uno de los personajes que encarnaba tenía sus


particularidades, matices que la hacían única y entrañable en cada película. Además de Arturo de Córdoba compartió estelares con grandes actores del cine nacional como Guillermo Murray, Julio Alemán, Fernando Soler, Carlos López Moctezuma y Enrique Rambal.

Arturo de Córdova
Carlos López Moctezuma
Entre los actores y actrices que fungieron como sus hijos en los diferentes filmes están Blanca Sánchez, Alicia Bonet, Maricruz Olivier, Julián Pastor, Valentín Trujillo y Alberto Vázquez. Alternó también con notables actrices consagradas como Carmen Montejo, María Teresa Rivas, Alicia Montoya y Ofelia Guilmain.






Blanca Sánchez, Alicia Bonet, Maricruz Olivier, Julián Pastor, Valentín Trujillo y Alberto Vázquez y Carmen Montejo, María Teresa Rivas, Alicia Montoya y Ofelia Guilmain.
Amparo Rivelles la elegancia
Siempre elegante, siempre distinguida, dueña de una voz grave y bien modulada, Amparo Rivelles ocupaba la pantalla entera con su recia personalidad y su temple. Su nombre era garantía de calidad a pesar de que muchas veces las historias no pasaran de ser meras comedias de entretenimiento.
En papeles dramáticos jamás se excedió, jamás llevó a sus personajes hasta el extremo de la cursilería lacrimosa.

Como un buen ejemplo de ello está la creación que hizo en cine de la célebre Anita de Montemar, protagonista de Ave sin nido, personaje que había alcanzado gran éxito en radio en los años cuarenta.
Escuchemos un poco de música de mano de "Los tres diamantes" en esta película:

                         

Amparo en la telenovela. Doña Macabra
En la televisión participó en un buen número de telenovelas, pero sin duda alguna la más recordada en México, aquella que tuvo un éxito inimaginable y constituyó un verdadero hito en la historia de este género televisivo fue Doña Macabra. Obra escrita especialmente para la televisión por el dramaturgo mexicano Hugo Argüelles, representa el primer ejemplo de telenovela de humor negro que se hizo en México, dirigida por Ernesto Alonso.
Historia simpatiquísima y llena de peripecias, cuenta la historia de una anciana de la época porfiriana ―Amparo Rivelles― que vive en un caserón lóbrego y lleno de misterio en compañía de una sirvienta que en su juventud fuera soldadera durante la Revolución ―Ofelia Guilmain.
La terrible fama de las dos ancianas, tildadas de brujas, corre por todo el barrio.
La excéntrica dueña de aquella mansión truculenta recibe en el seno familiar a una sobrina ―Carmen Montejo― y a su esposo ―Narciso Busquets―que acuden allí tentados por la perspectiva de hallar un tesoro que supuestamente las ancianas guardan con gran celo.
 Las escenas de terror se suceden, doña Macabra y su sirvienta urden infinidad de trucos para asustar a los sobrinos y hacerlos desistir de sus propósitos; al final, la bondad que esconde en realidad Doña Macabra se impone y los misterios de aquella mansión encuentran una explicación lógica.
Elenco de Dña. Macabra: Ernesto Alonso (Director), Alicia Montoya, Enrique Rambal, Ofelia Guilmain,
Hugo Argüelles (autor), Amparo Rivelles, Narciso Busquets y Carmen Montejo.

Hizo de México su segunda patria
El crítico Luis Reyes de la Maza resume así las bondades de esta telenovela: “En 1963 Ernesto Alonso reunió a tres monstruos sagrados del teatro nacional: las españolas Amparo Rivelles y Ofelia Guilmain y la cubana Carmen Montejo para interpretar los papeles principales de una telenovela escrita especialmente para ellas por el talentoso dramaturgo Hugo Argüelles, Doña Macabra.
Hacía su aparición un género inexplorado hasta entonces por la telenovela: el humor negro.

Bella y buena actriz. "La Rivelles" conquistó México
 La historia fue un éxito absoluto, las tres actrices estuvieron soberbias en sus papeles, acompañadas por dos excelentes primeros actores, Enrique Rambal y Narciso Busquets con la muy ágil dirección del propio Alonso”.






Es curioso que los más grandes éxitos de Amparo Rivelles en México fueran dos obras de humor negro. La versatilidad histriónica de esta extraordinaria actriz le permitió transitar del drama a la comedia con inigualable maestría. Amparo Rivelles vivirá por siempre en la memoria de México como ejemplo de señorío y clase; excelente actriz, gran señora que legó a este país el tesoro inigualable de su arte.

¡Hasta siempre, Amparo!
Y en nuestra próxima entrada, continuaremos hablando de Don Agustín Lara...

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