Queridos amigos, en primer lugar, gracias por vuestra diaria fidelidad. Estamos encantadas cada vez que vemos que las visitas se mantienen cada día, lo que significa que lo que hacemos os interesa.
Hemos pensado que cada domingo, en lugar de la entrada habitual, os vayamos pasando recetas familiares y que se hacen en nuestras casas de toda la vida.
¿Os gusta la idea?
Podéis dejar vuestra opinión en el espacio de comentarios que hay al final de cada publicación o bien en el siguiente correo delcuplealarevista@gmail.comBesos: Mar y Olga
Y comenzamos con nuestra primera receta:
En una cazuela de barro o en cacerola de base gruesa, freír en cuatro cucharadas soperas de aceite de oliva virgen sabor suave, 6 dientes de ajo grandecitos que se habrán pelado y aplastado para que suelten más el sabor. El fuego ha de estar medio para que se vayan sofriendo lentamente hasta alcanzar un color bien dorado (no quemar porque amargaría). Luego se pone pan sentado (en España decimos pan sentado al pan del día anterior) en láminas finas (aproximadamente 200 gramos). Sofreír con los ajos. Retirar del fuego y añadir una cucharadita rasa de pimentón dulce. Mezclar y volver a llevar al fuego. Verter 4 vasos de agua y poner una pastilla de caldo de verdura mezclar bien y subir el fuego para que vuelva a hervir. Mantener hirviendo a fuego medio unos 15 minutos.
Se sirve en cazuelitas de barro individuales escalfando un huevo en cada sopa que ha de estar muy caliente. También se puede echar un solo huevo en la cacerola donde se ha preparado, agitando el líquido para que se deshaga el huevo lo más posible.
Aconsejo comprar siempre huevos de gallinas en libertad y así fomentamos la crianza de aves en condiciones menos cruentas que cuando están encerradas poniendo día y noche… Pobre gallinitas…
Y aquí tenéis el resultado final: Tiene buena pinta, ¿verdad?
Y mañana... retomamos la biografía de Julita Fons...
Y mañana... retomamos la biografía de Julita Fons...
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